El saber del asesor técnico pedagógico y su profesionalización en la educación primaria AÑO. 1 Número 1
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RESUMEN INTRODUCCIÓN
Como parte del desarrollo de un proyecto de investigación que tiene como propósito elaborar una propuesta de Manual de la función del asesor técnico pedagógico en educación primaria en el Sector VII del estado de San Luis Potosí, México, se presenta este artículo que incluye reflexiones en torno a lo que debe saber el asesor técnico pedagógico para efectos de su profesionalización.
PALABRAS CLAVE: “Asesor Técnico Pedagógico” (ATP), antecedentes de la función, servicio de asesoría académica a la ecuela (SAAE).
En la educación primaria mexicana existe una figura que se denomina “Asesor Técnico Pedagógico” (ATP) para la supervisión escolar, quien tiene como tarea ofrecer asesoría pedagógica en las escuelas; sin embargo, esta actividad no se efectúa como debiera, ya que en la práctica su desempeño se centra más en el aspecto administrativo, mientras que la totalidad de sus funciones abarcan, en principio, las cuatro dimensiones de la gestión escolar: lo técnico pedagógico, la administración, la organización y la participación social.
El asesoramiento técnico pedagógico aún no ha alcanzado con nitidez su delimitación conceptual como actividad orientada a reforzar la enseñanza, porque como lo menciona Pérez (2000), carece de un marco teórico sólido capaz de precisar su identidad y definir sus funciones. Así, en este artículo se pretende delimitar su definición y las funciones de la figura del Asesor Técnico Pedagógico.
DESARROLLO
El Asesor Técnico Pedagógico (ATP) y sus funciones, aunque sin esta denominación, nació, según Nava (2006), posteriormente a la constitución del Sistema Educativo Nacional en 1921 y de la Secretaría de Educación Pública, para habilitar a los maestros en servicio que carecían de formación en el manejo de los programas. De acuerdo con González (2010), en ese entonces era el supervisor quien se encargaba de desempeñar funciones de asesoría, capacitación, acompañamiento y administración de las escuelas.
Según la SEP (2005), el servicio de asesoría académica a la escuela (SAAE) se define como un proceso de ayuda basado en la interacción profesional y orientado a la resolución de problemas educativos asociados a la gestión y organización escolar, así como a la enseñanza y las prácticas educativas de directivos y docentes.
Sin embargo, “no existe un perfil claro de los asesores debido a la ambigüedad e indefinición de las funciones que desempeñan, esto impide identificar las competencias necesarias para definir el perfil del ATP. Por lo que la función puede ser ocupada por profesores elegidos con criterios no académicos, lo cual impacta en su profesionalización” (Calvo, 2008, p. 4)La denominación de ATP responde a dos connotaciones, según Reyes (2008): Apoyo Técnico Pedagógico y Asesor Técnico Pedagógico. Para los fines de la presente investigación se hace referencia a la segunda.
El sustento teórico de esta figura se encuentra en la sociología comprensiva de Weber (1964), quien utilizó el concepto de “tipo ideal” como un modelo de lo que se quiere o pretende lograr. Este mismo concepto es empleado aquí para definir el tipo modélico del ATP, en relación con las funciones y acciones que debe desempeñar, y que habrán de consignarse en la propuesta de manual que se pretende diseñar, de modo que se cuente con un referente claro de su perfil.
El asesor debe ser un agente mediador entre el conocimiento pedagógico disponible y las prácticas docentes. De acuerdo con Bolívar (1999), para que la difusión del conocimiento valioso sea efectiva, requiere ser mostrada y aplicada didácticamente en clase; por lo tanto, no basta la presentación de teoría, sino que es preciso demostrar cómo se hace técnicamente algo y, por ende, apoyar la realización y aplicación en el aula.
Así, el ATP debe poseer un dominio sobre las diversas técnicas y estrategias para comunicarse con el asesorado (maestro o maestra), y tener elementos para motivar el trabajo del colega (Ríos, 2006, p. 24).
Autor: Mtro. Raudel Guevara Tovar. Estudiante de Doctorado en Educación. raudel270384@hotmail.comUniversidad Tangamanga.
Unidad de Postgrado, Campus Tequis, Área: Investigación
CONCLUSIONES.
Actualmente, el Programa emergente para la mejora del logro educativo (PEMLE) y el Plan de estudios de educación básica 2011, consideran que el ATP debe de realizar tanto la tarea de tutoría como la asesoría académica a la escuela. “Las redes de tutoría se forman entre los asesores técnicos, que por oficio apoyan el trabajo docente en las escuelas” (López, 2010, p. 34).
De acuerdo con la investigación realizada y con la práctica que el autor de este artículo ha tenido en la función de ATP, se puede expresar que éste deberá de poseer experiencia frente a grupo, conocer el plan de estudios y los programas 2011 de educación básica; los libros de texto gratuito de primero a sexto grado de educación primaria; metodologías, estrategias, técnicas de ense- ñanza y aprendizaje; formas de liderazgo y de relaciones humanas, todo con el propósito de brindar asesoría, orientaciones, acompañamiento que permitan al asesorado maestro resolver las situaciones problemáticas en el ámbito educativo.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
BOLIVAR, A. (1999). Cómo mejorar los centros educativos. España: Editorial Síntesis. CALVO, B. (2008, noviembre). Los asesores técnico- pedagógicos y el fortalecimiento de las escuelas de Educación Básica. Ponencia presentada en el IX Congreso Nacional de Investigación Educativa, Mérida, Yucatán, México. GONZÁLEZ, F. J. D. (2010). La influencia de la función del asesor técnico pedagógico en la gestión educativa para la construcción del perfil profesional que impacte en la calidad de la Educación Básica. Tesis de maestría en educación con campo en formación de docentes y práctica profesional, Unidad 241, Universidad Pedagógica Nacional, San Luis Potosí, S.L.P. LÓPEZ, S. L. D. (4 de diciembre, 2010). Propósito y práctica educativa del Programa Emergente. Educare renovación educativa. Revista para maestros de México, p. 65. NAVA, S. V. (2006). Las funciones del Apoyo Técnico Pedagógico en la Educación Primaria. Tesis de máster en docencia superior, Universidad Tangamanga, San Luis Potosí. PÉREZ G. Á. (2000). La cultura institucional. En Pérez Gómez, Á., La cultura escolar en la sociedad neoliberal (pp. 127-198). Madrid: Morata. REYES, H. N. S. (2008). El Asesor Técnico Pedagógico y sus posibilidades de influencia en la cultura institucional. Ponencia. Unidad 241, Universidad Pedagógica Nacional, San Luis Potosí, S.L.P. RÍOS, B. G. (2006). Las funciones del Apoyo Técnico Pedagógico en la Escuela Primaria. Tesis máster en docencia superior, Universidad Tangamanga, San Luis Potosí. SEP. (2005). Orientaciones generales para constituir y operar el servicio de asesoría académica a la escuela. México: Autor. SEP. (2006). La profesionalización de la función de asesoría técnico-pedagógica en educación básica a través de la capacitación integral. Curso Taller del Programa para Abatir el Rezago en Educación Inicial y Básica. SLP, México. WEBER, M. (1964). Economía y sociedad. México: Fondo de Cultura Económica.